Cada vez que nos acercamos al final del año, vuelve a ser el momento de tomarse un momento para reflexionar sobre esta obligación fiscal y el impuesto a pagar en España.
Toda propiedad (aunque no se alquile) de un inmueble genera una forma de renta para Hacienda.
Si se alquila el inmueble, hay que presentar esta declaración trimestralmente. (Algunos gastos pueden deducirse para obtener una renta neta de alquiler).
¿Y si no se alquila? Aun así, es obligatorio presentar esta declaración antes de que finalice el año. (una vez al año)
¿A quién se aplica esta declaración? Por cada residente no fiscal (puede tratarse de una persona física o jurídica) que posea bienes inmuebles. (No importa si se alquila o no).
Un no residente fiscal significa que presenta su declaración anual de la renta en un país distinto de aquel en el que está situado el inmueble.
Es importante señalar que NO se recibe un AVISO por este pago.
Las autoridades fiscales españolas suponen que uno mismo conoce la legislación vigente y toma las iniciativas necesarias.
Si se es residente fiscal español (cuando se pasa más de 183 días en España y el núcleo de las actividades económicas se desarrolla en España), no es necesario cumplimentar el MODELO 210, ya que toda la declaración de la renta se hace en España.
El tipo impositivo para un no residente y residente de un país de la Unión Europea es del 19%.
Siempre recomendamos ponerse en contacto con un especialista en este campo y presentar correctamente esta declaración de la renta.
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